diario de una vagabunda

                                                CAPITULO 2 
cuando salí del convento me contrataron de camarera en un bar,en el que dure bien poco por la ausencia de experiencia.cuando cumplí los 33 y como en los años anteriores los seguí pasando en la calle cobijada en unos cartones que encontré.Aunque fuera julio yo por la noche seguía  pasando frió ya que no tenia ropa apenas.a la mañana siguiente cuando me levante me di cuenta de que no estaba en la entrada de ese banco en el que dormía desde que era pequeña.Me encontraba a los pies de un árbol de tronco grueso y marrón me levante desorientada sin saber a donde ir,de repente un hombre mayor corvado y con bastón me dijo en voz baja y dulce "ya se a despertado la señorita"yo no entendía muy bien lo que quería decir,el hombre se fue alejando y con un simple gesto me dijo que le siguiera.le seguí hasta una casita donde al entrar me encontré con algo que nunca hubiera imaginado:-¡Mama!-dije dije a gritos las lágrimas empezaron a caer por mi rostro,el hombre mayor se situaba detrás mía me gire un momento para ver donde estaba y desapareció,desapareció todo mi madre, el hombre mayor incluso la casa y aquel árbol en el que me avía despertado,todo se avía esfumado y me encontraba en un espacio en blanco sin nada a mi alrededor.de repente desperté pero ahora si estaba en aquel banco en el que me acosté cubierta con los mismos cartones de siempre todo avía sido un sueño un bonito sueño del que no me hubiera despertado nunca,me seque las lágrimas me puse en pie y empecé a caminar sin rumbo por las calles de esa pequeña ciudad.